Compañía mortal

por | Ene 7, 2017 | Devocionales | 0 Comentarios

Esta entrada es la parte 7 de 31 de la serie Proverbios: Sabiduría Divina para la Vida Diaria

Lectura: Proverbios 7:1-27

Aquella familia de un barrio común nunca se imaginó la tragedia espantosa que viviría.  Su hijo de 15 años de edad, fue estrangulado por la mascota familiar. El joven se había ido a la habitación del segundo piso para jugar con una serpiente pitón birmana de 3.3 metros (10.8 pies). Nadie está seguro de cómo sucedió, pero la supuestamente “dócil” serpiente se convirtió en una asesina que se llevó la vida del muchacho.

Entonces, ¿por qué jugar con una poderosa serpiente, cuando puede convertirse en una horrible causa de muerte? ¿Por qué se le ocurre a alguien traer una criatura tan potencialmente peligrosa a la casa? ¿Por qué ingresar a una casa donde sabes que existe un animal, del que conoces que el dueño no tiene control o que no está calificado para manipular este tipo de animales?  Esta noticia es una clara exhortación que al igual que el viejo  adagio dice: “¡No juegues con fuego!”.  Es una señal de advertencia que parpadea alarmantemente.

Esta advertencia es aún más aplicable al peligro de jugar con el pecado, y en sobremanera cuando esas advertencias van ligadas al pecado sexual, que parece que sólo da placer, “sin herir a nadie”.  A simple vista parece inofensivo,  pero no lo es, al dejarlo crecer, y estar orgullosos de ello, el pecado sexual que pareciera insignificante puede convertirse en una terrible tragedia, leamos lo que dice Proverbios 7:24-27:

“Ahora pues, hijos, óiganme; presten atención a los dichos de mi boca. No se aparte tu corazón tras sus caminos, ni te descarríes por sus sendas.  Porque a muchos ha hecho caer muertos; los que ella ha matado son innumerables. Su casa está en los caminos del Seol que descienden a las cámaras de la muerte”

Como creyentes en Jesucristo, debemos controlar los impulsos de los cuales broten los deseos pecaminosos de nuestro corazón, en ese mismo momento debemos confesarlo al Señor y pedirle que nos ayude a superarlo.

  1. El jugar con un pecado tipo “mascota”, es comparable a jugar con una mascota mortal. Tarde o temprano se volverá contra nosotros.
  1. Los pecados no saltarán sobre ti para agredirte, somos nosotros los que dejamos que actúen dejando que nos destruyan.

MD/HG

“Hijo mío, guarda mis palabras y atesora mis mandamientos dentro de ti.  Guarda mis mandamientos y vivirás; guarda mi enseñanza como a la niña de tus ojos. Átalos a tus dedos; escríbelos en la tabla de tu corazón.” (Prov.7:1-3)

Este devocional forma parte del estudio Proverbios: Sabiduría Divina para la Vida Diaria.

Navegación de la serie<< Malos hábitosSin la perspectiva correcta >>
Compartir en:

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Acerca de Mi Devocional

Nacimos para servir y servimos a otros, porque amamos a nuestro Señor, Salvador y Creador Jesús…

Devocional Por mes

agosto 2025
L M X J V S D
 123
45678910
11121314151617
18192021222324
25262728293031

Mi Devocional

Libros y Cultura

Mi Devocional

Mártires de la Fé

Mi Devocional

Arqueología e Historía

Artículos Relacionados

Pequeñas amenazas

Pequeñas amenazas

Lectura: 2 Crónicas 34:14-21 Cuando las obras del Canal de Panamá dieron inicio en 1881, los constructores tuvieron...

El carril correcto

El carril correcto

Lectura: Gálatas 5:1-14 La mayoría de nosotros nació en un país donde se conduce por el lado derecho de la carretera,...