Lectura: Proverbios 17:17-22

Hoy día son bien conocidos los beneficios de la risa: ayuda con el insomnio, fortalece los pulmones, baja temporalmente la velocidad de la respiración, para muchos tiene efectos rejuvenecedores en la piel por su efecto tonificante y antiarrugas al reducir la tensión muscular.  Algunos médicos aseguran que reír es como un “trotar interno” por sus beneficios cardiovasculares.

El sabio Salomón lo escribió de manera muy poética en Proverbios 17:22: “El corazón alegre mejora la salud, pero un espíritu abatido seca los huesos”.

Un médico quien también es creyente, llegó a las siguientes conclusiones: “Un buen sentido del humor constante, sobre todo combinado con otros recursos internos como la fe y el optimismo, parecen tener una fuerza poderosa para tener buena salud”.

Si esto es así, entonces los creyentes deberíamos beneficiarnos de la risa, ya que tenemos la mayor de las razones para sentirnos gozosos.  Nuestra fe está firmemente arraigada en Dios, y la seguridad que tenemos gracias a esa fe, es la clave para el optimismo que debe caracterizarnos como creyentes.

  1. No temamos disfrutar de una carcajada ya que es una buena medicina.
  2. Una sonrisa sincera comunica a otros el gozo que Jesús trajo a nuestro corazón.

HG/MD

“El corazón alegre mejora la salud, pero un espíritu abatido seca los huesos” (Proverbios 17:22)