Lectura: Juan 14:1-6

Hace algunos años una persona que llamaremos «Joaquin» se definió a sí mismo como un “colado profesional”, y con razón.  Afirma haber asistido a 300 eventos deportivos o conciertos, incluyendo más de 25 juegos de la serie mundial de béisbol, sin haber pagado nunca ni un céntimo.  De hecho escribió un libro que describe cincuenta maneras de colarse en los conciertos y eventos deportivos.

Las “coladas” de este individuo plantean toda una clase de preguntas éticas; pero pasemos de eso a un asunto más importante.  Piensa conmigo un momento en lo que se necesita para entrar al cielo.  Jesús dijo que sólo había un camino: a través de Él (Juan 14:6).  El “boleto” para entrar es la fe personal en Cristo, creer que Él pagó la pena por nuestro pecado y aceptar Su oferta de perdón como un regalo gratuito, no barato (Juan 3:16; Rom.6:23).  Eso y únicamente eso, garantiza la admisión.

No hay forma de “colarse” por las puertas de gloria, y no tiene ningún sentido tratar de hacerlo.  Nadie entrará en la radiante presencia de Dios a menos que esté validado por el mismo Jesucristo.

Mucha gente se cuela en los eventos por el alto costo de los boletos y por la emoción de colarse.  Pero nunca podríamos pagar el precio de entrar en el cielo, Jesús lo pagó por nosotros.  No habrá gozo mayor que estar allí con Él.

  1. Cristo es la única puerta para entrar al cielo.
  1. Si aún no has aceptado Su invitación de vida eterna, hoy puede ser el inicio del resto de tu vida. ¡No esperes más!

NPD/VCG