Lectura: Isaías 51:1-16

Un gran número de personas parece de tecnofobia, que es el miedo o aversión hacia las nuevas tecnologías o dispositivos complejos, como a los teléfonos inteligentes y especialmente a las computadoras.  Este tipo de personas sienten pánico tan sólo de estar en la misma habitación con alguno de esos dispositivos.  Pero, ¿esto tiene sentido?  Pues no, pero, en sí ninguna fobia lo tiene.  Sin embargo, el temor que estas personas sienten es verdadero y terrible para ellos.

Este tipo de fobias me recuerda una que también tienen muchas personas, se trata del temor a las opiniones y acciones de los demás.  Imaginen por un momento cuando Dios nos ve, actuando y pensando como si nuestro bienestar estuviera en manos de la gente.  Muchas veces tememos tanto al qué dirán, que nos olvidamos que siempre deberíamos confiar en Dios, en cada paso de nuestra vida.

En nuestra lectura devocional, vemos el ejemplo de Isaías, quien nos dijo en palabras sencillas que temer al reproche de las personas es una tontería, porque son criaturas mortales, que al igual que la hierba, están hoy y mañana ya no están (Isaías 51:12).

Aunque la gente nos pueda causar daños físicos (Isaías 51:13-14); el Señor tiene la última palabra (Isaías 51:15-16), nunca debemos olvidar esa verdad, Él es Dios.

1. Nuestro futuro y bienestar eternos dependen única y exclusivamente de Dios.

2. Tu fe acabará con el temor, si en verdad está puesta en Jesús.

HG/MD

“Mejor es refugiarse en el Señor que confiar en el hombre” (Salmos 118:8).