Lectura: Juan 2:17

Es importante recordar que Jesús estaba asistiendo a una festividad que anunciaba su futura muerte como Cordero Pascual.  La Pascua no era como cualquier otra celebración para Jesús, le era muy personal.  Por las mismas evidencias que encontramos en el relato bíblico, se cree que para este tiempo de la historia, los líderes judíos promovieron la venta de animales y el intercambio de dinero.  Esto era “legítimo” en las afueras del atrio del templo.

Jesús como otras personas que estaban allí, había venido al templo a orar y a tener comunión con el Padre.  Talvez el bullicio de los animales y todos los trueques en las mesas lo molestaron.  Él había venido para estar con Dios.  A su vez sabía que Dios tenía la intención que este lugar de adoración, NO fuera un lugar para lucrar con los pobres y los extranjeros.  Estas razones encendieron el celo correcto de Jesús.  Fue la venta y la compra EN el templo lo que enfureció a Jesús, ya que este era un lugar donde las personas habían venido a orar.

Mientras Jesús  “echó a todos del templo”  y regañó a los vendedores de palomas diciendo: “¡Saquen esto de aquí! ¿Cómo se atreven a convertir la casa de mi Padre en un mercado?”; sus primeros seguidores se acordaron del pasaje que trata sobre el Mesías en el libro de Salmos en el Antiguo Testamento.  “El celo por tu casa me consume” –Salmo 69:9.  Jesús demuestra su autoridad sobre lo que se hace en el templo al limpiarlo.  Todos los que estaban observando la demostración de autoridad y el celo por Dios estaban asombrados.  Juan 4:45 registra lo que se dijo sobre Jesús algunos meses después cuando Él regresa a Galilea: “Cuando llegó a Galilea, fue bien recibido por los galileos, pues éstos habían visto personalmente todo lo que había hecho en Jerusalén durante la fiesta de la Pascua, ya que ellos habían estado también allí.

  1. Piensa en esto: Jesús era muy celoso por Dios. Celoso por Su Nombre y Su lugar de adoración.  Frecuentemente somos celosos por cosas equivocadas.
  1. Se necesita mucho valor para enfrentarnos a otros defendiendo las cosas correctas, no estamos hablando de violencia, estamos hablando de defender lo que crees.

SL/ME

Jesús: Celoso por Dios. “Sus discípulos se acordaron de que está escrito: “El celo por tu casa me consumirá.” –Juan 2:17

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.