Lectura: Isaías 33 – 35.

En las familias, las iglesias y en las empresas, no se soluciona nada porque nos obsesionamos con lo que está mal.  No es necesario un experto para saber que algo está mal cuando las personas se pelean y se hieren las unas a las otras con palabras y comportamientos desagradables.  Pero sí que es necesario un experto para saber cómo solucionar el problema.

Dios le reveló a los profetas de Israel no sólo lo que estaba mal, sino lo que estaba bien: “Y habrá allí calzada y camino, y será llamado Camino de Santidad; no pasará inmundo por él, sino que él mismo estará con ellos; el que anduviere en este camino, por torpe que sea, no se extraviará” (Isaías 35:8).  En lugar de centrarnos en lo que está mal, busquemos soluciones para la circunstancia en la que estamos.

 

Continúa la diversidad temática de este libro, pasando de una escritura tipo Salmo a profecías de fuerte contenido.  Hay que estar siempre atentos y ubicarse bien para saber de qué se habla.

1.  ¿Qué pide Isaías a Dios?  ¿Cuál debería ser nuestra oración como Iglesia necesitada?  ¿Cómo contestará Dios a las expectativas de un mundo justo?  ¿Quiénes serán consumidos por el fuego consumidor?

2.  ¿Cómo se describe al Rey que esperaban los judíos?  La Iglesia espera también a ese Rey, pero en forma diferente.  ¿En qué se diferencia la forma en que esperamos a Jesús a como lo esperan los judíos? (Mateo 24 vs. 2 Tes. 4:13-18).

3.  Antes de la Segunda Venida de Jesucristo, ¿Qué evento va a suceder?  ¿Cómo se llama ese día aquí? (Compara 2 Tes. 2:1-12).

4.  ¿Cómo se describe el Reino Mesiánico?  ¿Qué imaginas con la frase “Calzada de Santidad”? (Compárala con Mateo 7:13,14 y Juan 14:6)  ¿Por qué es necesaria la santidad? (Heb. 12:14; 1 Pedro 1:15,16; 1Tesalonicenses 5:5)