Lectura: 1 Pedro 5:5-11
En uno de esos vídeos cómicos de animales que vemos en las redes sociales, una ardilla trataba de escalar un poste de metal que sostenía un comedero de pájaros.
El pequeño animal subía con todo esmero, pero luego de un momento se deslizaba lentamente hacia abajo por el poste, y de nuevo lo intentaba sin éxito. Lo que la ardilla no sabía era que un ser humano había engrasado el poste.
Una de las tácticas más astutas del enemigo es “engrasar el poste”, para impedir que los creyentes progresen espiritualmente; lo que normalmente utiliza para engrasar es nuestro propio orgullo y la autosuficiencia.
En nuestra lectura devocional, el apóstol Pedro enumeró cuatro acciones que nos ayudan a seguir escalando espiritualmente:
- Someternos los unos a los otros (1 Pedro 5:5).
- Humillarnos delante de Dios Todopoderoso (1 Pedro 5:6).
- Depositar toda nuestra ansiedad sobre el Señor (1 Pedro 5:7).
- Disciplinarnos y ser vigilantes (1 Pedro 5:8).
Estas cuatro acciones nos permiten resistir los ataques de Satanás (1 Pedro 5:8), al dejar que la gracia de Dios fortalezca nuestra fe (1 Pedro 5:10).
- Satanás siempre querrá impedir nuestro avance espiritual, pero con la ayuda de Dios podemos seguir escalando.
- Si queremos evitar la tragedia del pecado, entonces debemos aprender de las estrategias que usa el enemigo.
HG/MD
“Sean sobrios y velen. Su adversario, el diablo, como león rugiente anda alrededor buscando a quién devorar. Resistan al tal estando firmes en la fe, sabiendo que los mismos sufrimientos se van cumpliendo entre sus hermanos en todo el mundo” (1 Pedro 5:8-9).
