Arqueología e Historia
BETANIA EN EL MONTE DE LOS OLIVOS (Βηθανίαν, Bēthanian, Betania).
Pueblo cerca de Jerusalén representado como un lugar importante durante todo el ministerio de Jesús, especialmente antes de la pasión.
Importancia bíblica
Los evangelios indican que Jesús visitó frecuentemente Betania, especialmente antes de la semana de la pasión (compare Mt 21:1, 17; 26:6). Fue el hogar de María, de Marta y de Lázaro (Juan 11:1), así como de Simón el leproso (Mateo 26:6; Marcos 14:3). Fue allí donde Jesús resucitó a Lázaro de entre los muertos (Juan 12:1) y donde fue ungido por María antes de su crucifixión (Mateo 26:6; Marcos 14:3; Juan 11:1). Además, la ascensión de Jesús habría ocurrido cerca de Betania (Lucas 24:50; Hechos 1:10–12; Bock, Lucas 9:51–24:53, 1944).
Los evangelios mencionan dos lugares diferentes llamados Betania (Scheinder, Exegetical Dictionary, 213):
- Betania en el monte de los Olivos se refiere a una aldea ubicada cerca de Betfagé, a unas dos millas al este de Jerusalén (Marcos 11:1; Lucas 19:29; Juan 11:18). Esta región era ampliamente conocida en el mundo antiguo por su hospitalidad hacia los peregrinos (Capper, “Essene Community Houses”, 498).
- Betania más allá del Jordán se refiere a la localidad donde Juan el Bautista comenzó su ministerio, así como el lugar donde Jesús fue bautizado (Juan 1:28).
Etimología
Hay dos posiciones principales con respecto a la etimología del nombre Betania:
- Es posible que recibiera su nombre de la aldea de Ananías en Neh 11:32 (Albright, Oriental Research, 158–160), la cual fue colonizada por los benjamitas después del exilio babilónico. Saller sostiene que la cantidad de objetos del período persa encontrados durante las excavaciones en Betania parecen confirmar esta teoría (Saller, Excavations at Betania, 374).
- Aunque otra posibilidad es que haya obtenido su nombre a partir de las palabras arameas beth y anya, que significan “casa de los pobres” u “hospicio” (Capper, “Essene Community Houses”, 472). Capper argumenta que los esenios fundaron “hospicio” fuera de Jerusalén para los leprosos y para otro tipo de personas que consideraban impuras. Marcos 14:3–10 confirma la presencia de leprosos en Betania (p. ej., Simón el leproso), mientras que Marcos 14:7 menciona el interés por los pobres.
Arqueología
En 1914, arqueólogos descubrieron tumbas de pozo cerca de Betania en el Monte de los Olivos que datan del período cananeo (Albright, Oriental Research, 159). Las excavaciones de Sylvester Saller de 1949 a 1953 revelaron que esta área estuvo continuamente ocupada desde al menos el siglo VI A.C. hasta el siglo XIV D.C.. (Saller, Excavations at Bethany, 1–98, 374).
Los arqueólogos han logrado recuperar los vestigios de cuatro iglesias antiguas en Betania (Ware, Archaeology of the Jerusalem Area, 259–61). La iglesia más antigua data del siglo IV y se construyó para honrar el sitio donde Jesús resucitó a Lázaro de entre los muertos (Ware, Archaeology of the Jerusalem Area, 259). La tumba de Lázaro todavía se puede encontrar en Betania, y el nombre actual de la aldea, el-Azarías (”la casa de Lázaro”) demuestra la importancia de este evento bíblico.
Fuente:
Michael S. Guyer, «Bethany on the Mount of Olives», ed. John D. Barry y Lazarus Wentz, Diccionario Bíblico Lexham (Bellingham, WA: Lexham Press, 2014).