Lectura: Mateo 12:22-32

Desde hace ya algunos años hemos sido testigos del auge de los video juegos en nuestra cultura, el cual crea un mercado que representa ganancias gigantescas para sus creadores.

En medio de todo este auge, también han surgido muchos sectores que se preocupan por el contenido de los juegos violentos y que se basan en el ocultismo, los cuales pueden llegar a afectar las vidas de los jugadores y más si estamos hablando de jóvenes y niños.

No obstante, no todos los juegos transmiten antivalores, muchos de ellos buscan desarrollar habilidades en quienes juegan, a través del desarrollo de estrategias para conseguir un fin.  Incluso en los últimos años también hemos sido testigos del desarrollo de juegos educativos con valores cristianos.

También es una realidad que todos nosotros estamos en una aventura llena de batallas espirituales contra enemigos reales y fieros (Efesios 6:10-20), y más vale que tengamos una estrategia para enfrentarnos a ellos (Mateo 10:16-25).

En nuestra lectura devocional en Mateo 12, cuando Jesús fue acusado por los fariseos de ser endemoniado, no sólo abordó su blasfemia, también trazó un plan para luchar contra el maligno. Jesús entendía que, como Segunda Persona de la Trinidad, tenía un poder con el que satanás no podía ni soñar.

Jesús respondió a sus acusaciones señalando en cual bando jugaba, y desafiando su lealtad. Este mismo asunto es crucial en nuestra estrategia para vencer a satanás y sus tentaciones en nuestra vida.

  1. Debemos estar preparados para presentar defensa de nuestras creencias, debemos tener estrategias para responder a quien nos enfrenta (1 Pedro 3:15).
  2. El enemigo tiene un plan muy bien estructurado, lo que debemos es estar preparados para enfrentarlo con la ayuda del Espíritu Santo (Hechos 4:31).

HG/MD

“Más bien, santifiquen en su corazón a Cristo como Señor y estén siempre listos para responder a todo el que les pida razón de la esperanza que hay en ustedes, pero háganlo con mansedumbre y reverencia” (1 Pedro 3:15).