Lectura: Lucas 23:10-12.

A donde iba Jesús en esta serie de juicios, ahí también estaban sus enemigos, los jefes de los sacerdotes y los maestros de la ley acusándole y tratando de que el juez de turno, también lo tuviera como digno de todas las acusaciones que le hacían; sin embargo, a Herodes en realidad no le importaba el caso, tan sólo tenía curiosidad por validar si este hacía o no milagros.

Al no obtener una respuesta de Jesús, Herodes lo tomó por loco, lo despreció, se burló, pensaba que no valía la pena tomárselo en serio, no era un criminal como tantos que habían pasado por sus manos o como él mismo era, se trataba de un galileo con delirios de grandeza, otro que se creía Mesías, y para sus adentros posiblemente decía, y es este nazareno, el carpintero, al que quieren hacer rey.

Es en esta coyuntura de burla, y no de admiración, que Herodes decide colocarle un manto lujoso, aunque no se nos dice el color posiblemente era purpura, pues era el color de la realeza, le colocó ese manto, para que por lo menos tuviera la apariencia de un rey, luego de burlarse y posiblemente golpearlo, lo devuelven a Pilato.

Aunque no se nos dice la causa de la enemistad entre Pilato y Herodes, pudo deberse a alguna disputa por el poder o enojo de alguna acción contra los judíos como la que se narra en Lucas 13:1-2.  Sin embargo, Jesús tenía la particular habilidad de unir a enemigos en su contra, como ya lo hemos visto con el equipo de Fariseos y Saduceos.  Ahora estos dos hombres enemigos debido al poder, encuentran una situación en común: no encontrar nada en contra de Jesús, pero tampoco hacer algo para liberarlo, cumpliéndose la profecía de Salmos 2:2 “Los reyes de la tierra se rebelan; los gobernantes se confabulan contra él y contra su ungido.

  1. A pesar de que sus enemigos confabularon e hicieron todo lo posible porque no consiguiera su misión final, Jesús no se desenfocó y cumplió su deber.
  1. Pablo resume muy bien, la forma en que personas sin Dios ven el mensaje de Jesús: “Mientras que nosotros predicamos a Cristo crucificado. Este mensaje es motivo de tropiezo para los judíos, y es locura para los gentiles,  pero para los que Dios ha llamado, lo mismo judíos que gentiles, Cristo es el poder de Dios y la sabiduría de Dios». 1 Cor.1:23-24.

MD/HG

Jesús: Tropiezo para judíos y locura para los gentiles.  “Mientras que nosotros predicamos a Cristo crucificado. Este mensaje es motivo de tropiezo para los judíos, y es locura para los gentiles” 1 Cor. 1:23.

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.