Lectura: Números 27:15-23

En la lectura devocional que hicimos este día encontramos dos veces la siguiente frase: “a sus órdenes”, esto con el fin de hacer hincapié en la forma en la cual Dios iba a guiar a Su pueblo.  El trabajo de Josué era dirigir a Israel para que “saliera” y “entrara” de acuerdo con lo que Dios le decía por medio del sacerdote Eleazar.

Esto nos debe hacer recordar cuántas veces tomamos decisiones para hacer algo o dirigirnos en cierta dirección, todo por seguir una ambición personal o por orgullo.  Muchas veces hacemos cosas que sabemos no son tan agradables a Dios, pero si le agradan a esas personas con las cuales queremos congraciarnos.  Al hacer esto sin duda “salimos” para hacer satisfacer nuestros deseos, en lugar de seguir la voluntad de Dios, lo cual al final solamente nos traerá frustración y desilusión.

Pero cuando “salimos” de nuestra zona de seguridad (lugar donde nos sentimos cómodos), para ir en la dirección que Dios desea, dicho en otras palabras “a sus órdenes”, Dios será el que guíe nuestros pasos y obtendremos como resultado una vida que sea de Su agrado.

Los tiempos de “entrar”, también son el resultado de seguir la voluntad de Dios, sin duda el entrar en tiempos de lectura de la Palabra de Dios y de oración, nos permitirán tener una visión más clara de nuestra misión como creyentes.

  1. Debemos presentarnos diariamente ante nuestro Señor, para recibir sus instrucciones, por medio de Su Palabra y a través de la oración, lo cual nos permitirá salir de nuestra zona de seguridad con Él acompañándonos.
  2. En lugar de confiar en tus habilidades, sin duda el lugar equivocado, pon tu fe en Dios y sométete a Sus órdenes. Al hacer esto nunca te equivocarás.

HG/MD

“En ti confiarán los que conocen tu nombre pues tú, oh Señor, no abandonaste a los que te buscaron” (Salmos 9:10).