Lectura: Apocalipsis 2:1-7

¿Por qué la pasión espiritual se marchita tan fácilmente? Cuando experimentamos el amor de Dios por primera vez, pasamos horas pensando en Él, estudiando Su Palabra y diciéndoles a los demás lo mucho que Él significa para nosotros. Luego sucede. Nuestros ocupados horarios lentamente apagan nuestra pasión. Nuestro anhelo de Jesús y nuestro estudio de Su carácter se convierten en un vistazo ocasional. ¡Sin duda el objeto de nuestro afecto no ha cambiado!

La iglesia en Éfeso luchó por mantener su pasión espiritual. Por medio de Juan, Jesús quiso ayudarlos a restaurar y mantener su amor y celo por Él. Aunque elogió a esta iglesia por su obra, Jesús vio que sus miembros habían abandonado su primer amor -a Él (Ap. 2:4).

Los efesios habían perdido su pasión espiritual por Jesús. Se había convertido en una ortodoxia fría y mecánica. Me pregunto si habían permitido que el sigiloso culpable de la religión y el mucho quehacer entraran en sus corazones. Lo que fuera, algo había robado el afecto que una vez habían reservado para el Señor.

¿Has permitido que algo te robe la pasión? Si es así, ésta puede restaurarse y mantenerse cuando constantemente recuerdas Su sorprendente amor demostrado en el Calvario. Arrepiéntete de tus actitudes pecaminosas y poco afectuosas, y por amor a Jesús repite tus “primeras obras” (v. 5).

  1. ¿Has olvidado lo que sentías por Jesús?  Hoy piensa al menos 10 minutos, ¿en donde estarías, si no le hubieras conocido?
  2. Ahora pasa otros 10 minutos pensando, ¿Cuál tipo de relación a Él le gustaría que tuvieras con él?
  3. Por ultimo pasa otros 10 minutos pensando primero: ¿Por qué estás haciendo lo que has venido haciendo, los últimos 6 meses?  Y segundo, ¿Cuál es tu plan para cambiar o mejorar tu relación con Dios, en los siguientes 6 meses?

NPD/MW