Lectura: 2 Corintios 5:1-11

Abierta al público en mayo de 1894, inspirada en la Torre Eiffel para dar a la gente la ilusión de andar en el aire: “la caminata de fe”. Es una plataforma de vidrio laminado que está ubicada en la parte más alta de la Torre Blackpool, construida a 117 metros de altura en la localidad del mismo nombre en Inglaterra.

Esta atracción turística tiene la fama de provocar las más diversas sensaciones en sus visitantes, desde la ilusión de ver el mar y la costa desde su increíble vista panorámica, hasta provocar un terror indescriptible. Se puede ver a quienes les toma todo su valor dar el paso de fe y caminar por los pisos de vidrio.  Todos los panfletos y afiches indican que es perfectamente seguro caminar por el lugar; no obstante, las personas siguen  teniendo miedo.

En el transcurso de la vida, muchas veces nos sentimos identificados con esa clase de temor, ya sea por un problema de salud, en el trabajo, con el estudio o la  familia; lo cual nos puede hacer cuestionar el poder y la presencia de Dios.

En momentos como estos, son reconfortantes las palabras del apóstol Pablo, quien en su segunda carta al pueblo de los Corintios, les dirige las siguientes palabras: “Porque andamos por fe, no por vista” (2 Cor.5:7), esto ocurre en su discurso sobre el “estar ausentes del cuerpo, y estar presentes delante del Señor” (v.8).  Posteriormente en su relato, usa una metáfora, llamando a nuestro cuerpo casa terrenal que ha de ser destruida; sin embargo, también dice que tenemos una morada hecha por Dios en los cielos, la cual debemos anhelar.  Pablo concluye que independientemente de las situaciones que enfrentemos, debemos ponernos la meta de agradar al Señor (v.9).

Definitivamente la caminata de fe que cada creyente emprende, en muchos momentos será desafiante y en muchas ocasiones atemorizante.  Pero debemos recordar que hemos puesto nuestra confianza en un Dios poderoso y presente, podemos dar un paso de fe, hoy.

1. Es mejor andar con Dios por fe, que ir solos por vista.

2. La fe en Dios, es el ingrediente necesario para caminar por esta vida.

HG/MD

“Porque andamos por fe, no por vista” (2 Cor.5:7)