Lectura: Salmos 24:1-10
No sé si has notado en algunos Salmos la palabra “Selah”, por ejemplo, en el Salmo 24:10: “¿Quién es este Rey de gloria? ¡El Señor de los Ejércitos! ¡Él es el Rey de gloria! Selah”.
Se cree que la palabra Selah fue añadida al final de este y otros salmos. Algunos estudios afirman que la palabra Selah, hace referencia a un interludio musical, ya que antes como ahora es muy común musicalizar los salmos. También se cree que puede hacer referencia a un silencio, pausa, interrupción o un momento para la reflexión puntual.
Muchas veces en la vida necesitamos un momento para detenernos, en medio del acelerado ritmo de vida, hacer una pausa y dar gloria a Dios por todo lo que nos ha dado, por ejemplo:
- Hagamos silencio para escuchar la voz de Dios (Salmos 46:10).
- Realicemos una pausa para darle un refrigerio a nuestro espíritu (Salmos 42:1-2).
- Interrumpamos la rutina diaria para hacer un recuento de nuestra vida y si es del caso, pedir perdón y hacer limpieza espiritual (Salmos 51:1-1).
- Proclamemos con gozo cuan misericordioso es el Señor (Salmos 65:9-13).
- Exaltemos el nombre de Dios por medio de la oración, aun en los momentos difíciles (Salmos 40:1-3).
- Terminemos el día reflexionando sobre la fidelidad de Dios (Salmos 119:148).
- Tengamos un momento Selah al menos una vez al día; nuestro espíritu y alma lo necesitan.
- El día no estará completo si no tenemos un momento de adoración.
HG/MD
“¿Quién es este Rey de gloria? ¡El Señor de los Ejércitos! ¡Él es el Rey de gloria! Selah” (Salmo 24:10).