Lectura: Rut 1:11-18

Un amigo me dijo una vez: “Joe, he llegado a darme cuenta que mi vida no está hecha de los sueños que tengo sino de las elecciones que hago». Cuenta con ello: Tendrás muchas elecciones en la vida. Y generalmente se reducen a una elección entre «¿qué es lo que quiero?” y “¿qué es lo mejor para los demás?”

Después de la muerte de sus esposos, Rut y Orfa se enfrentaron a una elección estratégica (Rut 1:11). Su suegra, Noemí, les dijo que debían irse a casa. Ella no quería que sus nueras sintieran obligación alguna por ella, a pesar del hecho de que su pérdida era mucho mayor. Había perdido a su propio esposo y a sus dos hijos.

Orfa y Rut podían irse a casa y comenzar una nueva vida, o quedarse con Noemí para ayudarla en un momento de gran necesidad. Sabían muy bien que la última elección probablemente significaría vivir en un país extranjero como viudas por el resto de sus vidas, ya que muy pocos hombres judíos querrían casarse con una extranjera.

Rut eligió servir a las necesidades de Noemí en vez de servirse a ella misma. Orfa eligió dejar a Noemí por lo que ella pensó sería una vida mejor. Rut continuó desempeñando un papel significativo en la historia judía y llegó a ser una antepasada de Jesús (Mt. 1:5).

  1. Haz la mejor elección. Elige servir a los demás.
  2. Continua sirviendo, esto siempre será de beneficio para otros, pero principalmente para ti.

NPD/JS