Lectura: 1 Tesalonicenses 4:13-18

El artículo de la revista Newsweek lo llamó: “el reencuentro final” ¿Sería una reunión de veteranos de guerra?  Tal vez sería un banquete en honor de los ex presidentes de Estados Unidos que aún viven?  Pero no, no era nada de eso, era sólo un rumor de que los miembros sobrevivientes del popular grupo musical: los Beatles y Yoko Ono, la viuda del fallecido Beatle: John Lennon, estaban «pensando hacer algo juntos otra vez.»

Para aquellos de nosotros que recuerdan el abuso de drogas y la moral descompuesta de la revolución cultural de los que los Beatles eran parte, que el rumor no tenía ningún entusiasmo. Pero hay otra reunión que llama la atención de los seguidores de Cristo, aun si los medios lo consideran de interés periodístico o no.

Anticipamos con corazones levantados la reunión final que se llevará a cabo cuando Jesucristo regrese a reunir a toda la familia de Dios junta. Los creyentes muertos serán resucitados primero (1 Tes. 4:16). Entonces, junto con los creyentes que viven en todas partes en la tierra, todos vamos a estar unidos con el Señor para disfrutar para siempre el esplendor de Su presencia (v.17).

Pero sólo aquellos que han puesto su confianza en el señor Jesús, salvador y redentor, y en Su retorno, participarán de este evento tan único y emocionante.

1. ¿Vas a estar en la reunión final? ¡Asegúrese de hoy mismo acéptale como Señor y Salvador de tu vida!
2. Entre los cristianos, no hay separaciones permanentes.

Pero permítanme revelarles un secreto maravilloso. ¡No todos moriremos, pero todos seremos transformados! Sucederá en un instante, en un abrir y cerrar de ojos, cuando se toque la trompeta final. Pues, cuando suene la trompeta, los que hayan muerto resucitarán para vivir por siempre. Y nosotros, los que estemos vivos también seremos transformados. Pues nuestros cuerpos mortales tienen que ser transformados en cuerpos que nunca morirán; nuestros cuerpos mortales deben ser transformados en cuerpos inmortales.

Entonces, cuando nuestros cuerpos mortales hayan sido transformados en cuerpos que nunca morirán,[a] se cumplirá la siguiente Escritura:

“La muerte es devorada en victoria.

Oh muerte, ¿dónde está tu victoria?

Oh muerte, ¿dónde está tu aguijón?”

1 Corintios 15:51-55 (NTV)

NPD/VCG