Lectura: Mateo 5:21-26

 

Luego de enseñarles a sus discípulos que Él ha venido a cumplir la Ley y no a anularla, les va a dar seis ejemplos de lo que les está hablando.  El primer ejemplo, es sobre como Jesús cumple la Ley que se encuentra en Éxodo 20:13 “No mates.”

 

Ellos han sido enseñados toda su vida a enfocarse en las acciones externas de una persona con la Ley.  Este era el gran problema con los fariseos, ellos vivían totalmente de la apariencia.  Jesús les está diciendo que el Padre se enfoca en el corazón.  1 Samuel 16:7 dice “No te dejes impresionar por su apariencia ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón.”  Jesús desea que sus discípulos entiendan que Él está interesado en la actitud de sus corazones.  Él sabe que lo primero que necesitan es una transformación de sus corazones, que con el tiempo va a traer un cambio en las acciones externas.  Los fariseos se enfocaban todo el tiempo en verse bien, pero descuidaban cultivar su vida interior.  Por esto Jesús los llamaba “hipócritas”.   De manera externa ellos mantenían la ley, pero internamente estaban llenos de egoísmo y pecado.

 

El primero de los seis ejemplos, enfocaba la importancia de estar reconciliado con su hermano.  La ley dice “No mates”, que es el acto exterior que nace del odio interno por otra persona.  Jesús va directo al corazón y enseña “no vivas una vida con odio sin resolver”.  Resuélvelo, “reconcíliate con tu hermano” “resuelve los asuntos rápidamente”.  Un odio sin resolver va a dificultar tu relación con el Padre.  Jesús va a la raíz del asesinato y enseña a sus discípulos a resolver el odio, para que nunca se llegue al punto de matar.

 

  1. “Todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el ministerio de la reconciliación: esto es, que en Cristo, Dios estaba reconciliando al mundo consigo mismo, no tomándole en cuenta sus pecados y encargándonos a nosotros el mensaje de la reconciliación.” -2 Corintios 5: 18-19.

 

  1. Pasa algún tiempo hoy meditando en Jesús como nuestro reconciliador con Dios.

 

SL/ME

Jesús: El Reconciliador. “Por lo tanto, si estás presentando tu ofrenda en el altar y allí recuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí delante del altar. Ve primero y reconcíliate con tu hermano; luego vuelve y presenta tu ofrenda.” -Mateo 5: 23-24.

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic