Lectura: Juan 3: 23-30

Juan el Bautista ha estado trabajando duro por años preparándole el camino a Jesús.  Marcos 1: 5 dice: “Toda la gente de la región de Judea y de la ciudad de Jerusalén acudía a él. Cuando confesaban sus pecados, él los bautizaba en el río Jordán.”  Puedes observar que Juan inició primero preparando a las personas de Jerusalén y en la región de Judea.  Ahora Juan se dirige al norte de Enón cerca de Salim en Samaria.  Recuerda que Juan ha estado bautizando en Betania, en el lado sureste del Jordán (Juan 1:28).  En Enón Juan continúa preparando a las personas para la venida del Mesías.  Ahora se encuentra bautizando a las personas al otro lado del río Jordán (Juan 3:26) y tiene su ministerio al norte, en Samaria, al otro lado del río Jordán donde bautiza a Samaritanos y a Galileos.  Él está preparando el camino para Jesús, quien va a llevar su ministerio a Samaria y luego a Galilea.

En este momento explota un argumento entre algunos de los discípulos de Juan y un hombre judío sobre el tema de los “ritos de purificación”.  Esto lleva a los discípulos de Juan a preguntarle para que les aclarara: “Rabí, fíjate, el que estaba contigo al otro lado del Jordán, y de quien tú diste testimonio, ahora está bautizando, y todos acuden a él.”  De quien están hablando es de Jesús.  Juan lo bautizó al otro lado del Jordán y ahora él está  bautizando.  Ahora las personas siguen a Jesús en vez de Juan.  Ellos están preguntando: ¿Qué pasa Juan?

Juan les responde: “Nadie puede recibir nada a menos que Dios se lo conceda. Ustedes me son testigos de que dije: «Yo no soy el Cristo, sino que he sido enviado delante de él.» El que tiene a la novia es el novio. Pero el amigo del novio, que está a su lado y lo escucha, se llena de alegría cuando oye la voz del novio. Ésa es la alegría que me inunda.  A él le toca crecer, y a mí menguar”.  Juan llama a Jesús el novio y a sí mismo como el amigo del novio.

  1. Toma unos minutos para que pienses en Jesús como novio.
  1. Este es una de las cosas más difíciles para un ser humano: menguar (decrecer, disminuir, bajar), que estamos acostumbrados a un mundo donde entre más crezco recibo más servicio, en la vida cristiana entre más crezco más sirvo y más crece Cristo en mí.

SL/ME

Jesús: El Novio. “El que tiene a la novia es el novio. Pero el amigo del novio, que está a su lado y lo escucha, se llena de alegría cuando oye la voz del novio. Ésa es la alegría que me inunda.” –Juan 3:29

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.