Mártires de la fe

Camboya: Haim y su familia

En la selva de camboya, a Haim y su familia les dieron palas y les dijeron que cavaran sus propias tumbas. eran rebeldes del Jemer Rojo que consideraban a los cristianos «enemigos» de la gloriosa revolución.

Los soldados les permitieron a Haim y a su familia arrodillarse, tomarse de las manos y orar. Haim entonces animó a los soldados a arrepentirse y aceptar a Jesús como Señor y Salvador. Los soldados estaban confusos por la compasión en su voz frente a la muerte.

Mientras hablaba, uno de sus hijos salió y corrió al bosque. Los soldados comenzaron a correr detrás de él, pero Haim los detuvo. Su calma convenció a los comunistas a ver lo que él haría.

Mientras su familia estaba arrodillada con los rifles de los soldados apuntandoles, Haim caminó hasta el borde del bosque «Hijo, ¿puede compararse el robo de unos pocos días de vida como fugitivo en el bosque a unirte a tu familia alrededor de una tumba, pero pronto ser libre para siempre en el paraíso con Cristo?» Después de un momento, hubo un movimiento en las ramas mientras el hijo de Haim con lágrimas en los ojos salía y se arrodillaba junto a su padre.

Haim miró a los soldados: «Ahora estamos listos para partir.»

Aun así, ninguno de los soldados podía apretar el gatillo. Sin embargo pronto llegó un oficial que no había presenciado el regreso del niño, regañó a los soldados por cobardes y mató a los cristianos.

Porque cualquiera que hace la voluntad de Dios, este es mi hermano, mi hermana y mi madre

Marcos 3:35

A algunas familias se les conoce por ser muy unidas. Otras se enorgullecen de ser ricas en extremo. Aun otras familias señalan como algo significativo sus excesivas ocupaciones. Aunque Dios puede utilizar esas otras cosas, su idea de la influencia es muy diferente. ¿Qué hace a una familia útil en el reino de Dios? La obediencia extrema.

No es el tamaño de la camioneta de la familia lo que importa; es su compromiso con Cristo. Dios diseñó la familia como un lugar en el que los padres guían con su ejemplo a fin de que los hijos aprendan cómo obedecer a Cristo. Aunque la situación de Haim era singular, nosotros podemos ser también obedientes en nuestras situaciones. ¿Cómo caracterizarías el compromiso de tu propia familia? ¿Es tu familia un ejemplo de una familia extrema?

Adaptado de: Devoción Extrema, la Voz de los Mártires, pag.102