Libros y cultura

Con Permiso por Marcos Vidal

Es una reflexión abierta y sincera sobre la situación real de la Iglesia y la práctica actual del cristianismo. El autor nos traslada algunas preguntas inquietantes y pensamientos desde el corazón que no pueden dejarnos indiferentes. ‘A lo largo de mi ministerio he llegado a cometer sistemáticamente dos errores de manera constante: He elevado ciertas ‘formas’ a la categoría de ‘principios’, y he degradado ciertos ‘principios’ a la categoría de ‘formas». Desde esta confesión inicial, el autor aborda y analiza seriamente diversos temas retándonos a situarlos a la luz del Evangelio y de la Palabra de Dios, examinando si verdaderamente estamos cumpliendo las instrucciones de Jesucristo para su Iglesia. ‘Confundir lo emocional con lo espiritual, darle más importancia a ciertas ideas, experiencias, estrategias, o incluso doctrinas, que al propio evangelio de Jesucristo es un error grave. Esta terrible incapacidad de distinguir entre lo esencial y lo secundario nos roba una cantidad enorme de energía, desvía nuestra atención de lo verdaderamente importante, nos resta eficacia como iglesia en el mundo y nos enreda en mil discusiones estériles’.

Contenido

Prólogo

Parte 1: La teoría de los dos errores

Capítulo 1: El Real Madrid siempre viste de blanco

Capítulo 2: El poder del evangelio

Capítulo 3: Lo inmutable

Capítulo 4: Lo variable

Capítulo 5: Un ejemplo bíblico

Parte 2: En la práctica

Capítulo 6: I am, you are, he is

Capítulo 7: Un millón de amigos

Capítulo 8: Amor cristiano contra tolerancia

Capítulo 9: Aislamiento

Capítulo 10: El antídoto

Capítulo 11: Prosperidad

Capítulo 12: La siembra y la siega

Capítulo 13: Vive tu sueño

Capítulo 14: ¿Qué le ha pasado al pecado?

Capítulo 15:  Por amor a la verdad

Capítulo 16: Liderazgo espiritual responsable

Capítulo 17: Los jueces

Capítulo 18: Lo grande contra lo pequeño

Capítulo 19: La meta más alta

Capítulo 20: Acerca de la luz y la sal

Capítulo 21: Evangelismo

Capítulo 22:  Impresionante

Capítulo 23: A todos los cristianos en España

Capítulo 24: Una palabras finales