Lectura: Mateo 17:24-27

Sólo Mateo relata este acontecimiento, según la ley, todo varón judío mayor de 20 años, tenía la obligación de pagar un impuesto anual, ligado inicialmente al mantenimiento del santuario (Ex. 30:11–16) y luego para el templo (Neh. 10:32). Este impuesto era ampliamente conocido y constaba del pago de medio siclo de plata o dos dracmas, el equivalente a dos días de trabajo de un jornalero de la época.

 

“¿Su maestro no paga el impuesto del templo?”, preguntaron los encargados del cobro, pregunta con doble sentido, pues si no pagaba los fariseos iban a reclamar inmediatamente esta situación.  Pedro, sin consultar dijo: “Si, lo paga”.

 

Al llegar a la casa donde estaba el Maestro, este no cuestiona a los cobradores del impuesto, sino hace pensar a Pedro, al consultarle. ¿Los hijos de los reyes de este mundo, pagan impuestos en sus tierras?  La respuesta es obvia: no.  Jesús es el hijo del Padre, por lo tanto, no está sujeto a este tipo de impuestos, en su tierra, su casa.

 

Nuevamente vemos a Jesús actuando de manera misericordiosa: pero “para no escandalizar”, Jesús le pide a Pedro que haga 2 cosas:

  • Ir al lago, echar el anzuelo, esperar que pique, sacar el pez, abrir su boca. Hace que Pedro, camine, actúe, el Señor muchas veces desea ver nuestro compromiso, nuestro sudor, sacrifico, antes de obtener lo que pedimos.
  • Consigue justamente lo que necesitaban para los dos: Un estatero, equivalente a 4 dracmas o un siclo de plata, y paga el impuesto.

 

  1. Jesús nos insta a ser activos y obedientes a ordenanzas, esto es difícil para muchas personas que tienen el concepto erróneo de que Dios debe solucionarles sus problemas, sin necesidad de realizar un mínimo esfuerzo.

 

  1. A todos se nos hace complicado el seguir el ejemplo de Cristo, y más en este tipo de casos en los cuales Jesús parece ceder sus derechos en función de no pelear cosas que realmente no tienen un peso significativo. ¡Cuán grande fue el ejemplo de mansedumbre que nos dio el Señor!

 

MD/HG

Jesús: El Hijo del Rey.  Al entrar Pedro en la casa, se adelantó Jesús a preguntarle: ¿Tú qué opinas, Simón? Los reyes de la tierra, ¿a quiénes cobran tributos e impuestos: a los suyos o a los demás? A los demás contestó Pedro. Entonces los suyos están exentos, le dijo Jesús» Mateo 17:25-26

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.