Lectura: Mateo7:15-27

Según un artículo en el Wall Street Journal, algunas personas en los EE.UU. están construyendo casas más fuertes como nunca antes.

Los huracanes, las inundaciones, y los tornados han causado miles de millones de dólares de daños a la propiedad en los estados de toda la nación. Así que, ante la insistencia de empresas, el gobierno, y las compañías de seguros que se encuentran en apuros, algunos constructores están edificando casas que son como fortalezas con ventanas que pueden resistir vientos de más de 200 kilómetros por hora, clavos para techos tan fuertes que sólo pueden ser cortados, y cascos que pueden capear las tremendas fuerzas que enfrenta un jet supersónico. En Bolingbrook, Illinois, una comunidad dañada por un tornado en los años 90, una compañía está construyendo una casa “fortificada” con la esperanza que la idea se imponga.

Nosotros que conocemos al Señor Jesús nos damos cuenta que cuando se trata de construir nuestro fundamento espiritual, éste debe ser fuerte y seguro. En la lectura bíblica de hoy, Cristo aclaró cuál debe ser ese fundamento cuando se refirió a “estas palabras mías” (Mateo 7:24), los cuales incluían Su enseñanza en el Sermón del Monte (Mateo 5-7).

Cuando recibimos las palabras de Cristo y Su obra a favor nuestro por fe, nuestras vidas espirituales están “edificadas sobre la Roca,” Cristo Jesús.

1. ¿Sobre que estás edificando tu vida? ¿Sobre tu experiencia, inteligencia, buen tino, sabiduría humanas, o sobre la Roca?

2. Es simpático que las personas se preocupen por su seguridad física, construyendo mejores casas, mejorando su salud, haciendo ejercicio, pero que difícil es ver a una persona no preocupada, sino ocupada en su vida espiritual.  ¿Cuál es tu prioridad, lo material o lo espiritual?

NPD/DCE