Lectura: 2 Timoteo 3:14-17
Cada Navidad les doy a mis dos hijas una «Caja de Mamá.» Cada caja contiene objetos para alentarlas a ser las mejores madres que puedan ser. Puede que allí haya libros de manualidades o proyectos especiales, libros o cintas devocionales dirigidos a madres jóvenes, botiquines de primeros auxilios, recetas para cocinar con los hijos – y a menudo algo personal como baños de burbujas, ¡para mimarse un poquito luego de un duro día como madres! Ha llegado a ser una tradición que Rosemary y Tanya han esperado cada año durante la última década.
Alentar a nuestros hijos a ser buenos padres puede comenzar aún antes. La mejor manera es comenzar a equiparlos con la Palabra de Dios mientras todavía son jóvenes.
El apóstol Pablo escribió que «desde la niñez» Timoteo había conocido «las Sagradas Escrituras» (2 Ti. 3:15). Y 2 Timoteo 1:5 menciona la «fe sincera» de la madre y la abuela de Timoteo. Esa fiel enseñanza e influencia espiritual ayudaron a habilitar a Timoteo para que fuera un hombre piadoso.
La Biblia es nuestro recurso más rico para ayudarnos a criar hijos que conocerán y amarán a Jesús. Nada es más esencial que «Las Sagradas Escrituras» para equiparlos para todos los desafíos de la vida.
1. ¿Qué estás haciendo para dar a la próxima generación «sabiduría que lleva a la salvación mediante la fe»? (3:15).
2. Talvez no seas madre o padre, pero también esta meditación es útil para saber que tienes una responsabilidad para con los más pequeños que tu, puedes regalar a alquien un regalo que le servirá para su vida diaria, ¿por qué no le regalas una Biblia a una persona que no espera que le regales eso?
NPD/CHK