Plan de Lectura: 1 Crónicas 21 – 23.

Habían visto llegar a su tierra ciertas personas muy diferentes de ellos en su semblante y su manera de vestir. Parecían viracochas, que es el nombre que le daban al Creador de todas las cosas, no sólo por su extraño aspecto físico sino también porque andaban en unos animales muy grandes que tenían pies de plata. Eso se imaginaban por el relumbrar de las herraduras de los caballos que desconocían. También los consideraban dioses porque hablaban entre sí vestidos de paños blancos, comían en vasijas de plata, leían libros y cartas, unos tenían barbas negras y otros bermejas, y tenían “yllapas”, que es el nombre que le daban a los truenos. Es que pensaban que los arcabuces eran truenos del cielo… Esa era la impresión que tenían los incas de los españoles.

A diferencia de los conquistadores españoles, Dios no nos conquista con engaño para quitarnos lo que más vale, incluso la libertad y la vida temporal, sino que nos conquista con amor para darnos lo que más vale, incluso la libertad y la vida eterna.

Debido a este tipo de engaños muchas personas tienen a ser muy desconfiadas al encontrarse frente a ciertas situaciones que resultan dudosas.  En el plan de lecturas también podemos llegar a pensar que existen diferencias en apariencia pues al hacer una comparación entre 2 Samuel 24 y 1 Crónicas 21 se revela que hay varias diferencias en la información dada.  Esto ocurre a veces donde hay pasajes paralelos como en los cuatro Evangelios del Nuevo Testamento.  Vamos a ver cómo debemos entenderlas y ayudar a los que dudan de la Palabra de Dios por causa de ellas.

1 ¿Cuál es la primera diferencia que notas?  El que quiere dudar ve aquí una excusa para hacerlo.  Pero el que quiere creer ve una razón para estar más seguro de que este incidente sucedió y que no es inventado por los hombres, sino para darnos otra perspectiva, como es el caso de los evangelios.  ¿Qué opinas?

2. ¿Qué otra diferencia ves en las tres posibles catástrofes ofrecidas para que David escogiera una de ellas?  Sucedió y algún día sabremos por qué hubo esa diferencia.

3. Hay otra diferencia en el nombre del dueño de la era.  También con nombres es común ver esas diferencias por razones de ortografía, pronunciación o nacionalidad.  Como era jebuseo y no israelita, tal vez usaba dos nombres.  Lo que es una contradicción para el no creyente es entendido por el creyente como una diferencia que no cambia nada y que hay alguna explicación que no hallamos en la lógica humana.  ¿Cómo crees que podemos explicar esta diferencia?

4. Sólo leemos de dos eventos en la vida de David cuando Dios le castigó (2Samuel 12 y 24).  ¿Cuál es el propósito de la disciplina divina? (Hebreos 12:4-11).  ¿Cuál ha sido tu experiencia con la disciplina? (1 Juan 1:4-10)

5. ¿Dónde creía David que era el lugar perfecto para construir el templo?  ¿Qué hizo para asegurar que ese templo se construyera bien?  ¿Por qué escogió a Salomón para construirlo?