Lectura: Hebreos 1:1-9

Un viejo piloto de helicóptero le contaba a sus nietos, historias con respecto a sus experiencias en diferentes misiones que tuvo que enfrentar a lo largo de su vida. En una de esas ocasiones les empezó a describir a los niños cómo era el funcionamiento de increíbles maquinas voladoras.

Les contó de una pequeña tuerca hexagonal que mantenía el rotor unido al mástil. ¿Sabes cómo le decimos a esta pequeña pieza de metal? Preguntó a los niños.  Ellos encogieron los hombros, y su abuelo con una pequeña sonrisa en el rostro les dijo: “Le decimos la tuerca Jesús”.

Los niños se sorprendieron.  Su abuelo les dijo, que aunque para la mayoría de personas esto les puede resultar un tanto irreverente y falta de respeto; si esa pequeña pieza de metal se soltase cuando estamos volando por los aires, el helicóptero sencillamente se vendría abajo y se estrellaría contra el suelo.  Es por ello que los viejos pilotos le pusieron ese nombre a la pequeña pieza, sin la cual no puede funcionar el aparato. De la misma forma, sin Jesús en nuestras vidas, no funcionaríamos como debemos y al final todo se vendría al suelo.

El autor del libro a los Hebreos en la lectura que hicimos hoy, nos habla de quién creó el mundo y Él es “quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder” (Hebreos 1:3).  Gracias a su poder creador es que podemos habitar en un planeta con todas las condiciones necesarias para mantener la vida, no somos un accidente, ni por supuesto obra de la casualidad, Dios hizo todo tan bien, que a pesar de todo y todos, este mundo permanecerá hasta que Él así lo determine.

Mas no sólo es el Creador, también quiere ser el Salvador y Señor de tu vida.  Él es el único que puede levantarte de donde estás y llevarte con cuidado en sus brazos, dándote vida y sosteniéndote para que puedas seguir caminando a Su lado.

  1. Si en este momento sientes que todo se está desmoronando a tu alrededor, este es el momento para recordar que Dios es el que sostiene todas las cosas, incluso tu vida.
  1. Jesús es todo lo que necesitamos.

HG/MD

“Él es el resplandor de su gloria y la expresión exacta de su naturaleza, quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder. Y cuando hubo hecho la purificación de nuestros pecados, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas.” (Hebreos 1:3).