Lectura: Mateo 6:16-18
Durante esta fase en el ministerio de Jesús, ha estado viajando a través de Galilea haciendo el llamado de “Ven y Ve” a las personas. Frecuentemente utilizaba los milagros o las sanidades como una forma de captar la atención de las personas. De esta manera compartía con ellos quién era Él, el Mesías, el Salvador del mundo. Muchos creyeron en Él y lo aceptaron como Mesías. Jesús luego los llamó con el: “Síganme”. Los retó a crecer como nuevos creyentes, a aceptarlo no sólo como el Camino al Padre, sino también como la Verdad. Jesús comenzó a invertir en estos nuevos creyentes, los invitó a ir más cerca, a que construyeran una relación con Él. En esta fase, Jesús también llama aquellos que por dos años han estado caminando con Él a: “Vengan, síganme y los haré pescadores de hombres.” Jesús reta a los nuevos discípulos a aceptarlo como la Vida, a abrazar y adoptar Su estilo de vida. El reino de Dios como estilo de vida.
Jesús durante este tiempo se enfocó en desarrollar dos áreas en sus discípulos (pescadores de hombres):
- El carácter del pescador de hombres.
- Las prioridades de un pescador de hombres. Como parte de su capacitación, los equipó en las disciplinas del reino tales como el dar o la oración. Jesús lo hizo mientras les enseñaba como pescar hombres. Él deseaba que ellos dieran u oraran, como Él les ha estado modelando por los últimos dos años en su caminar delante de ellos.
En la disciplina del ayuno Jesús dijo: “Cuando ayunen, no pongan cara triste como hacen los hipócritas, que demudan sus rostros para mostrar que están ayunando.” Nuevamente Jesús utiliza a los fariseos como ejemplo de cómo No ayunar. Para los fariseos todo se trataba de apariencia. En Juan 12:43 Jesús dice de los fariseos: “Preferían recibir honores de los hombres más que de parte de Dios.” Jesús le enseña a sus discípulos a ayunar en lo secreto, ante Dios y no ante los hombres, esto es un acto privado y la mayoría de las veces es un acto no controlado, como cuando tienes a un familiar gravemente enfermo o tienes una importante decisión que hacer. No debían hacer nada del otro mundo, por el hecho de que ayunaran. Si querían ayunar, debían hacerlo como una forma voluntaria para quitar distracciones y estar más cerca de Dios y no para impresionar a las personas, con su falsa espiritualidad.
- Pasa algún tiempo hoy meditando en las enseñanzas de Jesús, sobre las disciplinas del Reino.
- Reflexiona si haces las cosas para recibir el elogio de Dios y no de los hombres.
SL/ME
Jesús: Ayunó. “Luego el Espíritu llevó a Jesús al desierto para que allí lo tentara el diablo. Durante cuarenta días y cuarenta noches ayunó y después tuvo mucha hambre” -Mateo 4:1-2
Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.
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