Lectura: Salmo 37:1-9

El problema de la sobreinformación o «infoxicación», es el exceso de datos que satura nuestra capacidad de procesamiento mental; lo cual genera estrés, ansiedad, dificultad para concentrarse y tomar decisiones, y además puede afectar negativamente la salud mental y la productividad. Por ejemplo, es muy fácil preocuparse excesivamente por delitos que están fuera de nuestro control.

El salmista ofrece una perspectiva alentadora en cuanto a la información diaria. David comienza diciendo: “No te impacientes a causa de los malhechores” (Salmos 37:1). Luego, de una forma sencilla ofrece algunas alternativas para que la ansiedad no nos abrume. En resumen, en esencia nos invita a aplicar un mejor análisis mental frente a las noticias y situaciones complicadas que enfrentamos en este mundo.

¿Qué sucedería si en lugar de preocuparnos decidiéramos confiar en el Señor? (Salmos 37:3). ¿No sería mejor deleitarnos en Él (Salmos 37:4), en vez de preocuparnos en exceso? Tan sólo piensa cuánto cambiaría tu vida si no permitieras que las preocupaciones gobernaran tu mundo y le encomendaras al Señor tu camino (Salmos 37:5); ¡imagina la tranquilidad que tendrías si aprendieras a guardar silencio ante Él y esperar a que actúe! (Salmos 37:7).

No podemos cambiar las situaciones malas que pasan en el mundo, pero lo que sí podemos hacer es poner un límite a nuestra preocupación. Nuestra perspectiva cambia completamente cuando confiamos en Dios, ponemos nuestros caminos en sus manos y descansamos en Él.

1. En la vida siempre te acompañarán las luchas, preocupaciones y pruebas, pero debes entender que tan sólo el Señor te puede brindar la paz que anhelas tener.
2. Señor, ayúdame a confiar y descansar en ti cada día.

HG/MD

“Encomienda al Señor tu camino; confía en él, y él hará” (Salmos 37:5).