Lectura: Marcos 4:21-25; Lucas 8:16-18
Mientras Jesús estaba en la barca, compartió con su equipo de liderazgo y discípulos la razón por la cual les hablaba a las personas de Galilea usando parábolas. Él ya ha hecho tres recorridos a través de Galilea proclamando a las personas que Él es el Mesías. Que el reino de Dios ha llegado ahí. La gente se ha hecho una idea acerca de Jesús y muchos han endurecido su corazón hacia Él. Jesús le dice a su equipo que el misterio del reino de Dios les ha sido dado a ellos. Que el misterio es una relación personal con Dios a través de Él. Luego les revela el significado de la parábola del sembrador y la semilla. La clave es “la semilla” que es la “Palabra de Dios”. Jesús es la Palabra de Dios hecha carne. La clave no es el sembrador, si no la semilla: Palabra de Dios: JESÚS.
Luego de compartir este significado, Jesús regresó a su casa en Capernaum junto a su equipo de liderazgo y discípulos. Entró en la casa, allí tomó una lámpara y la llevó al cuarto donde estaban todos. Una multitud comenzó a formarse lo que era común en este tiempo. Las personas conocían donde vivía Jesús y estaban allí todo el tiempo. Jesús se dirige a su equipo de liderazgo y discípulos y les dice: “También les dijo: “¿Acaso se trae una lámpara para ponerla debajo de un cajón o debajo de la cama? ¿No es, por el contrario, para ponerla en una repisa?” Puedo imaginarme a todos en el cuarto reírse por la respuesta tan obvia. La razón para traer la lámpara es para que las personas puedan ver, no para esconderla. Jesús les dice que algún día todo va a salir a la luz. Lo bueno acerca de la luz es que siempre gana y vence a las tinieblas.
Jesús dijo en Juan 3: 19-21: “Ésta es la causa de la condenación: que la luz vino al mundo, pero la humanidad prefirió las tinieblas a la luz, porque sus hechos eran perversos. Pues todo el que hace lo malo aborrece la luz, y no se acerca a ella por temor a que sus obras queden al descubierto. En cambio, el que practica la verdad se acerca a la luz, para que se vea claramente que ha hecho sus obras en obediencia a Dios.” Jesús luego les dice que deben “poner mucha atención”. Él desea que sus líderes siervos pongan mucha atención y permitan a la luz de Dios brille en sus corazones.
- Tú también debes dejar que la luz perfecta de Jesús brillé en tu corazón, para que otros puedan verla brillar.
- Pasa algún tiempo extra hoy escuchando a Dios, orando para que puedas hacer Su perfecta voluntad en tu vida.
SL/ME
Jesús: Lámpara. “Tu palabra es una lámpara a mis pies; es una luz en mi sendero.” -Salmos 119:105.
Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic
