Lectura: Filipenses 2:5-11

El joven envió un mensaje a un sitio en la red que respondía preguntas acerca de la fe. Decía, “Tengo luchas con la afirmación de los cristianos de que Jesús es el único camino al cielo y a Dios. ¿Qué pasara con aquellos que tienen otras creencias?”

Este tipo de pregunta nos desafía a examinar nuestra opinión acerca de Jesús. Un repaso de las Escrituras que se refieren a Jesús y a su carácter único puede ayudarnos a que nos mantengamos firmes en nuestra creencia de que Él es el único camino.

Jesús no tiene par en la historia. Su ser mismo nos clama que encomendemos nuestras vidas a Él. Jesucristo es Singular:

Único en sustancia: Sólo Él es ambos, Dios y hombre (Juan 10:30).

Único en profecía: La vida de ningún otro líder fue profetizada con tanta claridad y exactitud (Miqueas 5:2).

Único en misión: Sólo Jesús vino a salvarnos de nuestros pecados (Mateo 1:21).

Único en nacimiento: Sólo Jesús nació de una virgen (Mateo 1:23).

Único en capacidad: Nadie sino Jesús tiene el poder para perdonar pecados (Marcos 2:10).

Único en existencia: Sólo Jesús existía antes del principio del tiempo (Juan 1:1-2).

Único en posición: Nadie más está en igualdad con Dios (Filipenses 2:5-6).

Único en reino: Sólo Jesús reina para siempre (Hebreos 1:8).

1. Nadie en la historia es como Jesús. Sólo Él merece nuestra confianza, y solo Él es el camino hacia Dios.
2. Hoy puede ser el día cuando invites a Jesús, el Único, a que forme parte de tu vida; entrégale a Él todos tus sufrimientos, dudas e inseguridades y sobre todo confía en Él para que sea tu Salvador y Señor.  Él es el Único que puede darte Vida Eterna.

HG/MD

“Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad” (Colosenses 2:9).