Lectura: 1 Reyes 11:6.

¿Por qué la gente inteligente hace cosas que no son inteligentes? Una y otra vez escucho tristes historias acerca de personas con elevados coeficientes de inteligencia que fallan en el área del discernimiento moral, lo que los lleva a trágicos resultados. Obviamente, un buen cerebro no es suficiente para impedir que una persona haga malas elecciones.

Esto contradice la creencia de algunos de que una mejor educación puede resolver las enfermedades de la sociedad. Este razonamiento va así: «Si educamos a las personas sobre los peligros de___________, no ‘lo’ harán, y por lo tanto, se evitarán consecuencias desagradables y no buscadas.»

Pero la experiencia y la Biblia nos dicen otra cosa. De hecho, el hombre más inteligente que jamás vivió podría servir como el modelo de las malas elecciones.

El Rey Salomón del antiguo Israel, autor de gran parte del libro de los Proverbios, escribió, «Con toda diligencia guarda tu corazón» (4:23) y «En el corazón del prudente reposa la sabiduría» (14:33). A pesar de conocer la relación entre el corazón y la sabiduría, el rey desobedeció a Dios casándose con mujeres extranjeras que «desviaron su corazón tras otros dioses» (1 Reyes 11:4). Como resultado de ello, el Señor dijo, «Ciertamente arrancaré el reino de ti» (v. 11).

La capacidad para tomar buenas decisiones demanda un corazón devoto a Dios.

1.  ¿Cuando fue la última vez que confiaste en tu «inteligencia» y esta te falló?

2.  ¿Cómo crees que puedes mejorar a la hora de hacer decisiones?

F: NPD/ JAL