Lectura: Hebreos 11:32-40

En estos últimos años ha habido un creciente gusto por los héroes de historietas, también llamados “comics”. Esto quizás sea porque nuestra generación está haciéndose mayor en un mundo sin héroes. La sociedad ha aprendido a esperar la decepción; los “héroes” de nuestro tiempo a menudo son desenmascarados y traicionan nuestros valores a cambio de sus vanos intereses.

A pesar que estamos rodeados de escándalos en el mundo de los deportes, la política y los negocios, siguen existiendo muchísimas personas en diferentes lugares del mundo, que son fieles a Dios sin importar las increíbles y difíciles circunstancias. Las páginas de la vida siguen registrando historias de madres que cuidan a sus hijos enfermos, sin importarles las innumerables noches de desvelos; padres que sacrifican sus intereses por darle a su familia un futuro mejor, o padres de familia que deciden donar los órganos de su hija que acaba de morir, para que otros niños puedan tener una esperanza de vida adicional.

Mediante la fe en las promesas de Dios, aun las personas que no se nombran en Hebreos 11:32-40, fueron fieles a Él debido a sus convicciones, incluso algunas de ellas hasta pagaron con sus vidas. El verso 38 de Hebreos 11 hace una descripción increíble de este tipo de héroes verdaderos: “El mundo no era digno de ellos”.

  1. Mantengamos nuestra mirada puesta en Dios y reconozcamos a las personas que muestran una fe viva en Él, esos son los verdaderos héroes de este mundo.

 

  1. La fe en Cristo puede convertir a personas ordinarias en héroes verdaderos.

HG/MD

“Fueron apedreados, aserrados, puestos a prueba, muertos a espada. Anduvieron de un lado para otro cubiertos de pieles de ovejas y de cabras; pobres, angustiados, maltratados.  El mundo no era digno de ellos. Andaban errantes por los desiertos, por las montañas, por las cuevas y por las cavernas de la tierra” (Hebreos 11:37-38)