Lecturas del día: Mateo 28:1; Marcos 16:1-3; Lucas 24:1.

No era un domingo como cualquier otro, ese primer día de la semana, sería una mañana gloriosa en Jerusalén y en el mundo entero. Antes de que el sol saliera, aquellas  mujeres se dirigían a terminar el trabajo de preparación que había quedado pendiente y no habían podido terminar porque el sábado estaba pronto a iniciar. No les importaba la posible pestilencia de un cuerpo en descomposición, ni que por tocar a un muerto serían impuras durante siete días (Números 19:11).

Probablemente sin saber que la tumba se encontraba sellada y que había guardas vigilándola, lo único que les preocupaba era quien les removería la gran piedra que bloqueaba la entrada, y por supuesto no esperaban que Jesús cumpliera su promesa de resucitar.

El tema de la muerte y resurrección del Señor siempre ha sido polémico, y muchos de los enemigos del cristianismo han planteado diversas teorías al respecto, hoy iniciaremos con dos de ellas:

a. Jesús no murió, tan sólo sufrió un desmayo y luego en la tumba fue reanimado por los discípulos.

Respuesta: Los soldados romanos estaban entrenados para reconocer la muerte y sin duda Él no hubiera sobrevivido a la herida adicional provocada por la lanza luego de haber pasado por el martirio de los golpes previos a la cruz y por supuesto a los efectos de la crucifixión.

b. Los discípulos y las mujeres se equivocaron de tumba.

Respuesta: Tan sólo hacía tres días, María Magdalena y la otra María (la madre de Jacobo y José) junto con Nicodemo y José de Arimatea, habían ido a la tumba donde estaba sepultado el Señor, así que las mujeres sabían dónde estaba sepultado.  Además, ¿cuántas tumbas tendrían guardias romanos resguardándolas?  Por otra parte, los líderes religiosos los habrían guiado a la tumba correcta con tal de mostrarles que Jesús todavía estaba ahí.

  1. ¿Estarías dispuesto a hacer por el Señor lo que hicieron estas mujeres?
  1. ¡El Señor murió y resucitó, de eso no hay duda! Es un hecho que confirma nuestra fe.

MD/HG

Jesús: Cumple Su promesa.  “Iban diciéndose unas a otras: ¿Quién nos quitará la piedra de la entrada del sepulcro?” Marcos 16:3

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.