Lecturas: Lucas 7:18-23; Mateo 11:1-6

 

Juan el Bautista ha estado en la cárcel por un año.  Herodes lo encarceló porque Juan lo ha estado reprendiendo por su adulterio, ya que vivía con la esposa de su hermano (Lucas 3: 19-20).   Lo más probable es que Juan ha estado encarcelado en el desierto de Maquero.  “Juan estaba en la cárcel, y al enterarse de lo que Cristo estaba haciendo…”  Algo de lo que estaba haciendo Jesús, provocó que Juan tuviera dudas si en realidad era el Mesías.  Aún los grandes líderes tienen sus momentos de dudas.   A pesar de la celda fría y todo lo desagradable de estar en ella, lo que más perturbaba a Juan era algo que Jesús estaba haciendo.  Quizá Juan escuchó que Jesús había escogido a doce hombres como líderes del movimiento y él no era uno de ellos.  Quizás pensó…“luego de todo lo que he hecho y me he sacrificado por el movimiento, Jesús no me ha escogido como líder, o no parece un mesías que los vaya a liberar de su opresión de romano.”  La razón de la duda, no se nos revela.

 

De seguro Juan estaba preocupado, y decidió enviar a dos de sus discípulos a preguntarle a Jesús: “¿Eres tú aquel que había de venir o esperaremos a otro?”  Cuando estos discípulos llegaron, Jesús estaba ministrando a las personas en Naín.  Estaba sanando a muchos enfermos, a otros con dolencias, con espíritus malignos y dando vista a los ciegos (Lucas 7: 21).  Cuando terminó, se volvió a estos discípulos y les dijo: “Vayan y cuéntenle a Juan lo que han visto y oído: Los ciegos ven, los cojos andan, los que tienen lepra son sanados, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncian las buenas nuevas.  Dichoso el que no tropieza por causa mía.”  Esta cita es muy semejante al mensaje dado anteriormente en Nazaret en Lucas 4: 18-19.  Este pasaje es una combinación de varios pasajes de Isaías – 29:18-19; 35:5-6; 61: 1-2.  Hay una frase que Jesús deja por fuera esta vez: “Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos”  (Lucas 4:18; Isaías 61:1)

 

Se ha sugerido que Jesús le estaba enviando un mensaje secreto a Juan, dado que Herodes estaba vigilando su correspondencia.  Jesús quería que Juan supiera que Él es el Mesías y que no estaba en los planes que fuera a salir de la cárcel, ni ser un líder.  Su papel en el gran plan de Dios ya se había cumplido.

 

  1. Jesús es AQUEL enviado por Dios. “…no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos.” -Hechos 4:12.

 

  1. No es malo tener dudas, exprésalas a Dios, busca sinceramente en su Palabra, pregunta a otros que tengan más conocimiento bíblico y si aún crees que no encuentras respuestas, confía como Job, en que Dios tiene el control (Job 42:1-6).

 

SL/ME

Jesús: Aquel.  “¿Eres tú aquel que había de venir o esperaremos a otro?” – Mateo 11:3

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic