Lectura: 1 Samuel 12:6-25

¿Por qué hay tanta gente que tiene miedo de ir al dentista? Puede ser el resultado de una mala experiencia. Una mujer contaba una historia con su dentista de la niñez: “Cuando empecé a enojarme y llorar y él me dijo: ‘Si no te callas, voy a pegarte’”. Ella ahora maneja 112 kilómetros hasta la Clínica Dental Sin Dolor en Kansas.

Las personas que tienen miedo de ir a Dios, experimentan un problema similar. Algunos pueden haber sido maltratados por los malos líderes espirituales. Otros pueden haber aprendido el miedo poco saludable a Dios por sus vivencias con sus padres. Y otros, pueden estar abrumados por sus pecados, al considerar que la demanda de justicia de Dios, los aleja sin posibilidad de acercamiento.  Al hacer esto, pierden de vista la provisión amorosa del sacrificio de su Hijo Jesús por sus pecados.

La gente en la lectura bíblica de hoy (1 Sam. 12) tenían miedo porque Samuel les expuso ante sus pecados.  Sin embargo, también les dijo que Dios deseaba perdonarlos.

Necesitamos reemplazar miedos irracionales, por respecto sano y humillación delante Dios.  La Palabra de Dios nos asegura en repetidas ocasiones que el dolor de ir a Él, es mucho menor que el dolor de evitarlo a Él.  También nos asegura que por causa de Jesús podemos acercarnos “confiadamente al trono de la gracia, para recibir misericordia” (Heb. 4:16).

1. Así como el dentista repara las caries en los dientes, Dios quiere reparar las caries espirituales en nuestro corazón.  No dejes que tus miedos te detengan de asistir donde el Dr. Jesús, especialista en reparar lo imposible.

2. Sólo Dios puede llenar el vacío del corazón.

NPD/MDH