Lecturas: Mateo 24:15-28; Marcos 13:14-23; Lucas 21:20-24.

En este sermón del Monte de los Olivos como ya hemos visto, la temática predominante es sobre los días finales. Merece la pena realizar un rápido recorrido por las situaciones más dramáticas que vivieron Jerusalén y su templo. En el año 168 a.C. Antioco Epifanes el terrible gobernante de Siria, invadió Jerusalén, y cambió el altar del templo por un santuario para Zeus, sacrificando incluso cerdos en él.  No olvidemos además la invasión romana a la ciudad en el año 70 d.C. después de la cual el templo queda destruido.

Algunos han dicho que la profecía de Daniel 9:27; 11:31, referida por Jesús en estos pasajes: Así que cuando vean en el lugar santo “el horrible sacrilegio”, de que habló el profeta Daniel (el que lee, que lo entienda); fue ya cumplida en estos eventos.  Sin embargo, si seguimos la historia y las demás profecías concernientes al fin de los tiempos, aun muchas cosas no se han cumplido y por lo tanto están por ocurrir todavía.

El tema de los días finales es de los más inquietantes de las escrituras, tal como lo describen los pasajes: “Porque habrá una gran tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá jamás”.

Estos versos fueron incluidos como una advertencia para las personas que vivirán en esos días, el pasaje no dice explícitamente que quienes vivían en esos tiempos, sufrirían las terribles situaciones que se describen.  Muchos estudiosos han dicho que algo pausó el reloj profético de Dios y para una gran mayoría ese algo fue la Gracia de Dios, lo anterior como consecuencia de que Israel rechazó a Jesús como Mesías (Hechos 7) siendo el detonante la muerte de Esteban, quien hablaba a su Pueblo, mientras estaba lleno del Espíritu Santo.

No obstante, es importante tener siempre presente las palabras del apóstol Pablo: “Hermanos, quiero que entiendan este misterio para que no se vuelvan presuntuosos. Parte de Israel se ha endurecido, y así permanecerá hasta que haya entrado la totalidad de los gentiles” (Rom.11:25).

  1. Debemos ser estudiosos de las escrituras y no dejarnos llevar por falsos maestros, seamos como los bereanos: “Éstos eran de sentimientos más nobles que los de Tesalónica, de modo que recibieron el mensaje con toda avidez y todos los días examinaban las Escrituras para ver si era verdad lo que se les anunciaba” (Hechos 17:11).
  2. Nuestra fe en Dios, debe ser firme, estemos conscientes que a nuestra vida vendrán pruebas que fortalecerán nuestra dependencia en Dios; además debemos estar agradecidos por este tiempo de Gracia en el cual vivimos.

MD/HG

Jesús: Habla sobre la Gran Tribulación y su Segunda Venida. “Porque así como el relámpago que sale del oriente se ve hasta en el occidente, así será la venida del Hijo del hombre. (Mateo 24:27).

Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.