Lectura: 1 Reyes 17 – 19.

Cuatro hombres, todos ellos hispanos transeúntes, de los que cruzan la frontera entre México y Estados Unidos para encontrar trabajo, se sientan en las vías del tren a beber tequila y a jugar a las cartas. Tan absorbente es la partida de naipes, y tan fuertes las libaciones de alcohol, que se les olvida por completo dónde están y el peligro que corren, y no oyen la estridente sirena del tren, tres mueren y uno sobrevive para contar la historia.

La pasión por el juego es como todas las otras pasiones que conturban el alma humana: es absorbente, dominante y obsesionante. El jugador, así como el bebedor, el drogadicto, el fumador y el humano común, una vez que empieza y se deja ganar por la pasión, pierde la personalidad, pierde la conciencia, pierde la moral y pierde la razón. Y esa pasión se convierte en una obsesión que aprisiona y no suelta hasta que mata, como los tentáculos de un pulpo gigante, o las fauces de un cocodrilo colosal o, como una corriente eléctrica de mil voltios.

Elías fue uno de los profetas más sobresalientes y controversiales del Antiguo Testamento, fue un verdadero hombre de Dios.  Mostró su fe durante el reinado de uno de los peores reyes de Israel.   Debemos aprender también de su humanidad, el también fue un ser humano normal expuesto a un mundo atrayente y mundano.

1. Al leer Santiago 5:17, 18 se nos dice que Elías era hombre sujeto a pasiones como nosotros, ¿Qué quiere decir eso?  Elías también es un ejemplo de una vida de oración, recordemos el milagro de la sequía y la sanidad del hijo de la viuda.  Al evaluar nuestra vida, ¿Seríamos consideramos como un ejemplo de oración?

2. ¿Cuál era la lección central que Elías quería enseñar a su pueblo idólatra en el Monte Carmelo?

3. Como leímos en Santiago, Elías fue un hombre común y corriente con fortalezas y debilidades.  ¿Puedes identificarte con Elías al huir a Horeb, la zona desértica ubicada al sur de Beerseba, que no sólo quedaba fuera de la frontera de Israel, sino más allá del límite sureño con Judá, todo esto debido a la amenaza de Jezabel? ¿Siempre tu fe está al 100%, qué hace que a veces desmayes?  ¿Al leer la historia, cómo crees que Dios te anima cuando estás en esos valles oscuros de tu vida?  ¿Cuál fue la gran lección que aprendió Elías en el Monte Horeb?  ¿Por qué buscó Elías este monte para refugiarse? (Éxodo 3:1, 12; Hechos 7:30)  Necesitas tiempos a solas con Dios, como éste de Elías, para recargar tus fuerzas.

4. ¿Cuál fue el simbolismo del llamamiento de Eliseo?  Esto es muy similar a las carreras de relevos donde los competidores corren por tramos y le entregan una “estafeta” o “testigo” a su compañero para que este continúe con la carrera.  ¿De quién recibiste el “testigo” del mensaje de salvación y a quién estás preparando para que continúe tu carrera?