Lectura: Juan 14:15-31; Mateo 26:30; Marcos 14:26.
La mejor forma de demostrar el amor es obedeciendo, Jesús mostró este principio para con su Padre durante todo su ministerio terrenal, es por ello que le dice a sus discípulos estas últimas palabras en el aposento alto: “Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos”. A continuación les relata sobre cuatro cosas que las personas no creyentes no pueden tener.
- Sólo los creyentes pueden disfrutar de la compañía del Espíritu Santo, el Ayudador Divino (15-17, 26). Él es el que nos guía, nos consuela, nos muestra y enseña el camino de verdad, por el cual debemos seguir y nos recordará las enseñanzas del Maestro.
- Sólo los creyentes pueden tener la verdadera vida que nos brinda nuestro Señor (18-19), debido a que Jesús está vivo y venció a la muerte, y no somos huérfanos.
- Sólo los creyentes pueden regocijarse de tener una relación directa con Dios, por medio de Jesús (20-25), es tan estrecha esta relación que Dios ha hecho Su templo en nosotros (1 Cor. 3:16). Nuevamente Jesús recalca ante una pregunta de Judas (no Iscariote), que la clave de mantener sana esta relación con Dios es la obediencia.
- Sólo los creyentes podrán gozar la paz real que nos da Dios (27-31), esa paz que no puede entender alguien que no es salvo, la que el mundo trata de imitar por medio de tratamientos, diversión, placeres, dinero u otras cosas que pasan tan rápido como llegaron, la paz de Dios permanece en el corazón de los creyentes.
Si como creyentes entendiéramos y aceptáramos a plenitud estas verdades que el Señor les habló a sus discípulos, entonces, no volveríamos a tener angustias sobre el futuro o dudas sobre lo que Dios desea que hagamos en el presente; seríamos verdaderamente libres para servirle. Dichas estas cosas y luego de cantar algunos salmos, salieron hacia el monte de los olivos, donde los eventos finales de su ministerio terrenal continuarían.
- La obediencia muestra nuestro grado de amor.
- Si quieres disfrutar de estas cuatro cosas de las que acabamos de escribir, debes aceptar el llamado de Jesús: Ven y ve.
MD/HG
Jesús: Paz. “La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden.” Juan 14:27.
Este devocional forma parte del estudio anual cronológico de la vida de Jesús: La Vida de Jesús, el cual llega a ustedes en alianza con Sonlife Classic.
