Lectura: Salmos 46

Se supone que las personas deban llamar al 911 sólo para emergencias, pero muchas de ellas no entienden o no siguen las reglas. Los operadores de emergencias de la policía en Colorado Springs han recibido llamadas de personas que informan que su televisor no está funcionando, que preguntan cuando va a dejar de nevar o que quieren denunciar un robo de identidad pero quieren permanecer en el anonimato.

A menudo me he preguntado si muchas de nuestras oraciones pidiendo ayuda Le sonarán frívolas a Dios. Es imposible saberlo, pero hay una cosa de la que podemos estar seguros: En nuestros momentos de necesidad, el Señor no sólo escucha nuestros gritos, está presente con nosotros.

El Salmo 46 describe momentos de gran calamidad, incluyendo guerra y desastres naturales. Pero es una canción de confianza que comienza y termina con la misma afirmación: «Dios es nuestro refugio y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. . . . El SEÑOR de los ejércitos está con nosotros; nuestro baluarte es el Dios de Jacob» (vv.1,11).

El Señor siempre está obrando para lograr Sus propósitos -incluso cuando el mundo parece estar desmoronándose. Él nos dice, «estad quietos, y sabed que yo soy Dios; exaltado seré entre las naciones, exaltado seré en la tierra» (v.10).

No tenemos que temer. Cuando clamamos por ayuda, sabemos que Él escucha y que vendrá junto a nosotros.

  1. No preocupes, ocúpate en expresarle a Dios en oración tus peticiones y acciones de gracias.
  2. Llega ante Dios con un corazón agradecido y humilde, eso agrada a nuestro Señor.

“El sacrificio que sí deseas es un espíritu quebrantado;
tú no rechazarás un corazón arrepentido y quebrantado, oh Dios.” – Salmos 51:17

NPD/DCM